Por fin conseguí el libro de Slavoj Zizek (con mala ortografía escribo su apellido porque no encontré el «conito» que lleva arriba cada una de las dos «z», a manera de acento), editado por Anagrama.
Circunstancialmente, leí la recomendación.
Ni siquiera lo conocía (aunque es autor de más de 40 libros escritos), pero la reseña me gustó (suelo basarme de vez en cuando en reseñas, aunque confieso que en algunas coincido y en otras ocasiones me decepciono) y empecé a buscarlo.
No estaba en electrónico y pedirlo por internet tardaría casi lo mismo en llegar que esperar a comprarlo en México.
Me atrapó y distrajo de todo lo demás.
Es una compilación de 107 chistes, contenida en un libro de poco más de 164 páginas, que hay en la obra del autor.
Reconozco mi gran incapacidad para ciertos -varios- temas, uno de ellos la filosofía; pero este libro, con no pocas dificultades lo leí y he de ser honesto volveré a leerlo de nuevo por dos razones: 1. porque me gustó e hizo reflexionar; 2. pero sobre todo porque hay algunos comentarios o chistes que o bien no entendí aunque releí en el momento -volví a releer y tampoco- o de plano me causaron un instante de «estate quieto» que entonces me voy a dar a la tarea de quitarme la tozudez que me bloquea.
Un humor que no solo puede hacer reír, hace reflexionar y cuestionar.
Como lo señala el editor: «…compendio bufo de la historia occidental de los últimos cincuenta años…mostrando su aspecto más estrambótico y sin olvidar que, como decía Guy Debord <<lo verdadero es un momento de lo falso>>».
Me atrevo a recomendarlo, a quien quiera leerlo y no le ofenda («lo que te choca, te checa») el que ideas preconcebidas se demuelan por la enorme insolencia e irreverencia con que llega a tratarlas el autor, que citando de nuevo al editor: «…en su deconstrucción de lo que llamamos <<verdad>>…», no tiene freno en tratar temas que por creencia religiosa o política -o ambas- pueda hacer que alguien se sienta agredido.
Como dice el Dr. Héctor Zagal, citando a Kant: «atrévete a saber».
Buen domingo.
En fin