Carta intentando externar, con el corazón en la mano, lo que en verdad te amo…(2)

En verdad es tanto lo que quiero expresarte, que me hago bolas y no  sé cómo hacerlo -siempre me sucede- para que caigas en la cuenta que este amor que te tengo, es realidad, es así de absoluto.

Y no hay nadie más que tú, no existe mujer que me haga bien y con quien me sienta bien en todo, más que a tu lado; por eso me duele más cuando te enojas conmigo o cuando te desesperas y peor aun cuando me olvidas, por prioridades que tienes en la vida, y pareciera que paso a ser una molestia o un inconveniente.

No quiero que me soportes, pero tampoco quiero solo tu agradecimiento.

Quiero tu amor, ese mismo con el que empezamos con mucho miedo y un caudal de inseguridades, consecuencia de diferentes historias que acabaron por ponernos uno frente al otro, sin imaginar si quiera que sería el comienzo de esto en que ahora estamos y que de una u otra forma tenemos exclusivamente para nosotros.

El universo infinito, cabe en nuestra intimidad; la misma que en nuestro espacio de dos por dos se llena de amor y de nosotros de mil maneras distintas cada vez que platicamos, nos abrazamos, nos amamos, entregándonos irrestrictamente el uno al otro, sin contar ni importar nadie más.

Pero son pocas veces y en contadas ocasiones, que radiante y absoluta te entregas a mí, dejando lo demás afuera porque nos estorba y no tiene cabida en nuestro lecho -soporte de nuestras vidas, donde nos recobramos el uno al otro después de nuestros felices encuentros que dan vida, que me dan gozo, esperanza y consuelo- haciendo en esos instantes, que tenga razón de ser lo nuestro y tenga el vigor necesario para aguantar lo devastadora que a veces resulta la vida.

No es queja, ni reproche, menos reclamo. No es la finalidad de estas frases; por el contrario, quiero por mi compromiso contigo, estar bien y sobre todo que lo estés tú, para que solo tengas en tu mente aquello que se refiere a lo que no sea la necesidad de sentirte amada y por ende tranquila, sin angustias.

Pero no únicamente depende de mí, sino también de ti, porque aunque haga todo lo posible porque estés bien, si tu no lo estás, porque no puedes, porque vives apesadumbrada, porque siempre hay algo que no te satisface o te incomoda a tal grado que te hace enfadar o molesta, hace que lo que se va construyendo, de golpe se derrumbe y pega en el corazón, y de tal suerte, me vas lastimando y cuando estoy por restañar la herida, viene otro golpe que la abre, no permitiendo sanar lo ya sucedido para continuar hacia adelante.

Sé que temores concretos hay muchos y las certezas son nulas; pero ¿cómo podremos acomodar todo lo bueno para que a partir de ahí edifiquemos  nuestro amor poniendo diques a todo aquello que nos quiera afectar?

La respuesta no la tengo, pero trabajando juntos, además de echarnos un clavado en el pasado y lo pasado en nuestra experiencia de vida juntos, quizá sirva y ayude a que podamos ambos encontrar la clave que nos lleve a que tu estés plena, tranquila, serena y crezcas  como ser humano -que aunque no te des cuenta lo has venido haciendo, casi imperceptiblemente- de tal manera que, a partir de aceptar las cosas como son, puedas transitar contenida en ti misma, sin tener sufrimientos o angustias que en ocasiones te dejan desolada y triste.

Me viene a la mente aquella oración que dice: Dios concédeme Serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar; Valor para cambiar las que sí puedo y Sabiduría para distinguir la diferencia.

Esto no es ninguna clave maravillosa ni se puede cumplir invariablemente a pie juntillas, claro que si se tiene confianza en Dios y se entrega uno a Él, pudiera suceder que la perspectiva de las cosas y el entorno cambiara, en función y a partir de nosotros, de nuestra perspectiva, no porque la realidad se modifique.

No podemos cambiar nada, sino sólo a nosotros mismos.

No podemos hacer que todo sea diferente, pero sí que lo sea a nuestro parecer.

Podemos buscar que nuestra perspectiva del entorno cambie, primero aceptándonos como somos, amarnos nosotros mismos y luego derramar con ese caudal nuestro amor en nuestra pareja, de tal manera que, de a poco, se note el cambio y se vierta positivamente en nuestros seres queridos.

No son fórmulas mágicas que hagan milagros, ni recetas de cocina que, cumpliéndolas al pie de la letra, nos permita que todo salga a las mil maravillas.

Pero a fin de cuentas, la vida se trata de eso, de un continuo empeñarse en buscar ser en verdad mejores en función a nosotros mismos y luego estando bien, hacer lo conducente para los demás, a quienes enfoquemos nuestro amor.

Así lo pienso, así lo siento y no encuentro mejor forma de hacerlo (buena o mala) que de esa forma.

No pretendo sea una filosofía de vida, ni tampoco es charlatanería barata.

Trato de ser alguien, para aquella a la que amo en todo su ser y que acepto tal cual es; que busco sea cada vez mejor, para si misma y lograr con ello (ojalá) que te pueda amar todavía más y mejor.

Se que probablemente te parezcan desvaríos; tal vez lo sean, pero estoy buscando la forma de darle a entender a tu alma, que mi amor por ti es verdadero, es real, no es un mero tiempo de recreo o un “brake”, sino la razón de permanecer en ti como anhelo, igual que yo te traigo dentro, en el tuétano, en mi sangre, en mis neuronas, en mi sentimiento todo.

Te amo, y decirlo no es un mero convencionalismo de personas que decidieron pasar la vida juntos y que con un buenos días o un hasta luego, se saludan sin más.

No eres para mí un formulismo cotidiano con el cual en forma mecánica y automática se da la respuesta condicionada para que permanezcas latente sin cambios.

Por el contrario, cada que te digo: Te Amo, se me va la vida y palabra que se me escapa un suspiro en pos de ti, como grito acallado que se sale del alma para ir a tu encuentro, aun estando lejos.

No sabes la de veces que te acaricio en el aire y casi puedo percibirte en esta mi desenfrenada locura de querer estar contigo.

continuará…

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s